Arte para los niños ¿una necesidad o un pasatiempo?

Muchas escuelas en el mundo, han considerado que es más importante el aprendizaje de las matemáticas o la lengua que de las artes. Esto ha hecho que se le dedique mucho menos tiempo a la educación lúdica y artística. Incluso, muchos de nosotros como padres, consideramos que es más importante que nuestros hijos aprendan ciencias a que practiquen artes.

Es fundamental comprender que ningún aprendizaje es más necesario que otros. Así como las ciencias contribuyen al desarrollo mental de nuestros niños, las artes cumplen un papel valiosísimo en el desarrollo corporal e intelectual de los pequeños.

¿Has escuchado de las
inteligencias múltiples?

Si no lo has escuchado o no tienes muy claro qué es, aquí te lo explicamos. Las inteligencias múltiples intentan explicarnos que todos los seres humanos nacemos con potencialidades diferentes. Hay muchos que nacen con talento para las matemáticas, las ciencias o la biología pero hay otras personas que tienen una increíble capacidad para las artes, el movimiento o las relaciones con los demás.

Esta teoría dice que las personas podemos, hasta cierto punto, adquirir todas estas inteligencias a través de la práctica y el entrenamiento de nuestras habilidad. Es por eso que los espacios para el arte son tan importantes.

¿Cómo el arte estimula las
capacidades de mi hijo?

Las artes son formas que inventamos los seres humanos para expresar lo que sentimos y lo que pasa en nuestro cuerpo. Además, suelen ser ese lugar en el que nos sentimos libres para expresarnos. Por eso, incentivar prácticas artísticas en tus hijos es vital para su desarrollo emocional.

Además hay una práctica artística para cada necesidad de desarrollo: la pintura o la plastilina despiertan en tus hijos la motricidad fina; es decir, la habilidad para hacer cosas con los músculos más pequeños del cuerpo como los dedos o los ojos.

Por otro lado, la danza, el teatro, la gimnasia o las artes escénicas, son aliados fundamentales para la motricidad gruesa. El manejo de su cuerpo en el espacio se hará más fácil a medida que se fortalecen esas capacidades artísticas.

Cabe resaltar que además de todas las bondades del arte, el hecho de expresar sus sentimientos, contribuye a que los niños aprendan a reconocer cuándo están tristes y suelen tener mejor empatía con otros. Además, conocen los límites de su cuerpo, sus posibilidades y potencialidades

¿Cómo puedo acompañar a
mis hijos con este proceso?

• Entender que cualquier acto artístico debe ser su creación personal.
• Saber que en el arte, como actividad recreativa, no existen esas limitantes del bien o del mal.
• No juzgar la forma de hacerlo ni “su belleza”, le ayudará a tus hijos a explorar sus pasiones, sus estilos y sus formas de ver la vida.

Disfruta cada segundo junto a ellos, las expresiones artísticas son una forma maravillosa para compartir en familia y estrechar los lazos entre padres e hijos.